Jueves 2 de Abril de 2015.
La vía “Llobet – Bertomeu” está considerada como una de las buenas clásicas del Levante y en concreto de Mascarat. Tiene una longitud de 250 metros y un grado de V+, aunque en algún croquis de la red o guía podemos ver que le dan 6A por el diedro del quinto largo. Veo más acorde el grado V+.
Mascarat desde Toix:
Respecto al equipamiento… variopinto diría yo. Encontramos de todo un poco en la vía y vimos que habían desaparecido chapas. Justo donde faltan se puede proteger en fisuras o puentes de roca. Nosotros subimos por si acaso y al final los usamos: el semáforo de alien, friends del 0’75 al 2 y medio juego de empotradores. Con 12 cintas express mitad largas y mitad de aros cosidos para alargues es suficiente. Las reuniones a excepción de la última, hay que reforzarlas. Pueden venir bien un par de aros de 120 para triangular nuestros seguros flotantes en éstas y un par de walkies sobre todo para los últimos largos donde dejamos de ver al compañero y donde por lo general, el viento sopla. Cuerdas dobles mínimo de 60 metros si se empalman los tres últimos largos.
Dejamos la furgo en la Urbanización Maryvilla. La aproximación a pie de vía (20’’) la hacemos con mucho cuidado por el arcén izquierdo de la carretera.
Puente donde se practicó por primera vez es España el "Puenting":
Los tres primeros largos de la vía son muy fáciles, tan solo algún encontramos un par de pasos algo pulidos en el muro de entrada del L2 (Vº). Por lo general la roca es bastante compacta, pero existen tramos de roca bastante rota al principio del L1, al final del L3 antes de salir a la Feixa y unos bloques y lajas dudosos en el vertical comienzo del L6.
Comienzo del L1:
Muro de entrada del L2:
Vistas desde la R3:
Hacemos reunión al pie de un muro casi a tope de cuerda. Luego toca subir hacia la Feixa un corto tramo por terreno algo descompuesto.
La vía empieza a ganar calidad en la segunda mitad. La primera chapa del L4 está alta pero hay bastante canto. Bonitos pasos para abandonar el diedro hacia la derecha y la placa fisurada que encontramos después.
La vía empieza a ganar calidad en la segunda mitad. La primera chapa del L4 está alta pero hay bastante canto. Bonitos pasos para abandonar el diedro hacia la derecha y la placa fisurada que encontramos después.
En el L4:
La R4 la encontramos tras realizar una travesía hacia la derecha por terreno fácil esquivando algún que otro arbusto. En la R4 veremos las siglas “UBSA”.
Laura en la travesía "vegetal", llegando a la R4:
Para llegar al diedro que le da el grado a la vía, hay que hacer una corta travesía hacia la derecha desde la R4.
El diedro está equipado con chapas. Se nota el paso de cordadas pero la roca no está tan lavada como habíamos leído en algunos post.
L5 desde arriba. No tumba tanto como parece en la foto... Laura está en la R4:
Últimos metros del L5:
Una vez chapado el cuarto parabolt, toca salirse hacia la izquierda por terreno en el que baja la dificultad y en el que tendremos que emplazar algún seguro flotante.
En el croquis que llevamos quedan tres largos cortos más que decidimos finalmente empalmamos en uno. Ojo a los primeros metros con algún que otro bloque o laja dudosa.
Subimos de forma directa en dirección a los techos superiores que cierran el paso, saltamos la primera reu que vemos a nuestra derecha y unos metros más arriba encontramos un par de clavos que marcan el camino a seguir.
Primeros metros de nuestro último largo:
Pasos en travesía con ambiente en los que a elección del escalador, toca elegir si coger presas de manos con malos pies (manos a la altura de los clavos) o buenos cantos para pies (pies a la altura de los clavos y nada para manos…) Nosotros tiramos de recursos aprendidos en “La Pedri” y fuimos con los pies a la altura de los clavos, ¡¡¡ upsss vaya patio !!! Hay que bailar.
Pasada la travesía de los clavos nos metemos debajo de un techo con roca pinchuda de excepcional adherencia donde hay un parabolt y una reunión antigua de mírame pero no me toques.
Flanqueamos el techo hacia la derecha, nos metemos en un diedro con un pasito antes del primer parabolt y de ahí para arriba por lo más evidente donde iremos encontrando alguna que otra chapa en placa hasta la última reunión.
Este largo final es muy bonito, chupa material y hay que jugar mucho con los alargues para llegar decentemente y sin el arnés a la altura de los tobillos.
Foto al final de la vía con el Peñón de Ifach y Toix detrás nuestra:
El descenso lo hacemos por las terrazas (hitos) con algún que otro destrepe “expo” al principio.
Comenzando el descenso:
El camino en su parte final pasa por encima de un túnel de las vías del tren para adentrarse en un pequeño pinar y de él sacarnos de nuevo a la carretera. Toca subir por la carretera de nuevo a la Urbanización Maryvilla donde hemos aparcado. Desde la cumbre más o menos nos lleva 1 hora.
La oferta de vías en esta escuela es amplia. Esperamos volver para poder realizar algunas de las otras clásicas.
¡¡¡ A ver si nos ponemos al día con los post que nos quedan !!!
*** BUENAS ESCALADAS ***